Xavier Úbeda, profesor del Departamento de Geografía de la Universidad de Barcelona, se encuentra en Chile para formar parte de una serie de actividades convocadas por el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales UC (IEUT), y el Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN).

Durante la semana recién pasada, el académico del Departamento de Geografía de la Universidad de Barcelona, Xavier Úbeda, participó del seminario internacional «Incendios urbano-rurales: de la preparación a la recuperación sostenible» organizado por el Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN). Además, realizó la clase abierta «Planificación urbana e incendios forestales», en el marco del curso de pregrado en Planificación Urbana «Laboratorio de evaluación ambiental urbana» dictado por el profesor Kay Bergamini

En el marco de esta visita, conversamos con el académico acerca de los riesgos de incendios, y el rol de las políticas públicas en pos de la prevención y reconstrucción.

¿Cuáles son los principales factores de riesgos para las zonas urbanas y las zonas rurales?

En las áreas forestales la acumulación de combustible y su continuidad, se llama en términos forestales y de bomberos, la existencia de continuidad vertical y horizontal del combustible, que no haya ningún tipo de discontinuidad que evite que el fuego se propague. Para las zonas urbanas, el riesgo es que ese bosque con un alto riesgo de gran incendio esté próximo, e incluso muchas veces intercalado entre lo urbano y lo rural.

¿De qué forma las políticas públicas pueden orientarse a prevenir los incendios?

Se debería potenciar, por parte de las administraciones, que ese límite de lo rural a lo urbano, tuviese una carga de combustible muy baja, potenciando menor densidad de vegetación y a poder ser mosaico con áreas sin vegetación. Y que, en caso de incendio, los servicios de extinción pudieran posicionarse y combatirlo. Siempre va a haber un conato de incendio, por diferentes causas, que puede desarrollarse en un gran incendio, por lo que hay que estar preparado. También sería positivo, que la gente que vive en esa interfase, supiese, fuese consciente, que vive en una zona de riesgo, y en caso de incendio, cómo deben actuar, ya sea con sistemas de evacuación eficientes o facilitando el paso de los servicios de extinción. También promoviendo espacios urbanos sin infraestructuras que puedan avivar más el fuego.

¿En qué consisten los procesos de reconstrucción por los incendios? ¿Cuáles dimensiones consideran?

Se debe hacer una evaluación en cada caso, no hay una norma general para todos los espacios. Debemos conocer cuál ha sido el grado de afectación, la severidad con la que ha quemado. Esto si nos referimos a espacios forestales. A veces, la no gestión, es la mejor de las decisiones. En el caso urbano, lo bueno sería poder reubicar a los vecinos en zonas con menor riesgo. Podría aprovecharse el hecho que haya habido un incendio para repensar el modelo de urbanización, y disminuir el riesgo que supone vivir en una zona de interfase. Son decisiones complejas que deben ser muy bien explicadas a la población, que tiene un arraigo en el lugar que ha vivido siempre o por mucho tiempo.

En el caso de España ¿cómo se gestiona el riesgo?

En España estamos en proceso también de aprendizaje, hay muchas propuestas, que pasan por fomentar la vuelta a lo rural. Ha habido un abandono muy grande de las prácticas silvícolas, agrícolas y de ganadería extensiva. Revertir esta situación es muy complejo, a nivel social y económico. Potenciar el campo y a sus habitantes, así se reduciría el riesgo de gran incendio forestal, que es el peligro mayor. Incendios forestales siempre habrá, tenemos que intentar disminuir el riesgo de gran incendio forestal, el más devastador y que se sale de toda capacidad de extinción. El crear mosaico: forestal, agrícola y de pastos, sería una buena manera de disminuir el riesgo, junto con tener zonas de bosque con bajas cargas de combustible, sobre todo ante un escenario de cambio global que nos indica que habrá más temporadas con temperaturas elevadas y una distribución de precipitaciones más irregular.

Galería de la actividad:

Revive aquí la presentación realizada en CIGIDEN:

Entrevista | Xavier Úbeda: «Podría aprovecharse el hecho que haya habido un incendio para repensar el modelo de urbanización»