Desde una perspectiva socioespacial se propone el concepto vulnerabilidad residencial para comprender las dimensiones que generan desprotección e inseguridad propias del arrendamiento.
Tesista: Adriana Patricia Marín-Toro
Profesor Guía: Felipe Link
Comisión: Roberto Moris, Nelson Carroza, Jorge Insulza
Fecha de defensa: 03/15/2015
Vivienda bien localizada para sectores de bajos ingresos en Chile es cada vez más difícil con la actual política habitacional del país y el encarecimiento del valor del suelo. Por otro lado, existen recomendaciones internacionales sobre al arriendo como solución a los patrones de segregación espacial que la política de vivienda ha promovido y por los cambios sociodemográficos que actualmente presenta América Latina. Sin embargo, análisis sobre el arriendo y los arrendatarios han sido escasos en Chile, como también las políticas públicas vinculadas a este sector. A través de una lectura de un caso particular, el Barrio Puerto de Valparaíso que presenta más de un noventa por ciento de arrendatarios y una tradición en este tipo de tenencia de la vivienda, se exploran y describen a escala de barrio por medio de una estrategia cualitativa, las dimensiones del arriendo vinculadas al arraigo, los sentimientos de pertenencia al hogar y el barrio, más allá de la condición de propiedad con el suelo. Además, se dan a conocer sus características, los factores y actores externos que intervienen para su persistencia y discontinuidad.
El Barrio Puerto presenta actualmente un contexto que pone en tensión la permanencia de los arrendatarios característicos del sector debido a procesos de renovación urbana, sumado a un escaso reconocimiento social, cultural y legal, les configuran como un grupo fácil de desplazar frente a procesos de transformación de las áreas residenciales de la ciudad; desde una perspectiva socioespacial se propone el concepto vulnerabilidad residencial para comprender las dimensiones que generan desprotección e inseguridad propias del arrendamiento.