En un contexto de globalización versus localización, sobreviven culturas ancestrales dependientes de su territorio y por lo mismo resistentes a migrar de éste. No obstante, la gran mayoría de estos pueblos han enfrentado grandes presiones socio-territoriales causadas por los encuentros con diversos paradigmas de “desarrollo” que vienen con los procesos globalizantes. Este trabajo expone a la cultura indígena Kogi, que a pesar de sus transformaciones, se posiciona como un ejemplo para aquellas comunidades que buscan ser parte de los movimientos de transición hacia un desarrollo local comunitario y con miras a la sustentabilidad. Mediante una exploración de su Diseño Territorial y la evolución del mismo por las presiones globalizantes, esta tesis evidencia su capacidad de mantener la relación sociedad-naturaleza, que los convierte en un referente para entender una idea de bienestar, de respeto por el entorno y de diálogo con lo global; especialmente con énfasis en zonas rurales andinas.
2014
Magíster en Asentamientos Humanos y Medio Ambiente
PaísColombia
Estado AlumnoTitulado