Al poco andar de que la OMS declarara en 2020 la expansión del COVID-19 por el mundo como una Pandemia, la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), por encargo del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, destinó recursos a la elaboración de estudios que abordasen distintas aristas producidas por los impactos de la enfermedad en distintos campos del quehacer de las personas.
Dos de esos proyectos fueron adjudicados por el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales, uno sobre consideraciones urbanas y territoriales a nivel de vivienda, barrio y ciudad para las medidas de confinamiento, y otro sobre los “Impactos del COVID en la huella de carbono de hogares de Chile”.
Es precisamente este último proyecto, conducido por la profesora Carolina Rojas, que cuenta con la participación de los profesores Gonzalo Salazar, Caroline Stamm, Kay Bergamini y Felipe Irarrázaval, el que se ha abocado a medir cómo están funcionando (en mayor o menor medida) las emisiones intradomiciliarias, midiendo y levantando una serie de variables sobre modos de consumo, calefacción, aislación de la vivienda, y otros.
Para la muestra se escogieron cuatro ciudades: Coronel, Temuco, Valdivia y Osorno, abarcando cuatro realidades de cuatro distintas regiones del sur de Chile, bajo la hipótesis de que “las cifras globales no indagan suficientemente en el tema de la huella de carbono de los hogares, la cual podría haber bajado en algunas dimensiones, pero subido en otras, y tampoco sobre zonas con alta contaminación del aire”.
El proyecto, entonces, tiene por objetivo medir la huella de carbono de los hogares en ciudades chilenas afectadas por el COVID-19 pre, durante y post medidas de confinamiento para estimar cambios en los consumos de los hogares chilenos, con la finalidad de aportar con propuestas para la sustentabilidad ambiental y económica en las emisiones CO2 y los presupuestos familiares de los hogares.
Equipo
Primeros resultados
Recientemente, se publicó un reportaje en el diario El Sur de Concepción, anunciando resultados preliminares que sugieren un aumento importante en el uso del gas y la electricidad durante los meses de invierno.
Así también, por ejemplo, en Coronel, se detectó un aumento en el uso del automóvil particular en desmedro del transporte público y el tren. Por ello, el equipo del proyecto se abre a la posibilidad de implementar subsidios para la calefacción en las viviendas.
Hoy, 22 de abril, día en que se celebra el Día Mundial de la Tierra, quisimos indagar más sobre los resultados preliminares de este proyecto (aún en ejecución) con la directora de la investigación, Carolina Rojas.
CAROLINA ROJAS / GEÓGRAFA
“Vamos a presentar los resultados en un focus group a una cantidad importante de actores locales y nacionales para fortalecer políticas públicas y puedan tener más conocimiento de las ciudades post COVID-19 que tendrán que gestionar”.
Uno de los impactos positivos del COVID-19 destacado a nivel internacional (advierte el proyecto) ha sido la reducción de las emisiones de CO2 y de la huella de carbono, lo cual puede ser una excelente oportunidad para implementar medidas que ayuden a la sustentabilidad de las ciudades. Hasta ahora, ¿Cómo contrasta esa realidad con las emisiones intradomiciliarias que han observado durante su investigación?
CR: Efectivamente, por primera vez en la historia desde el alza sostenida de emisiones de Co2 equivalentes, desde el año 1950 por la pandemia del COVID se ha producido una baja, se estima que en total las emisiones a nivel global han caído un 5 %. Ahora es interesante saber que pasa a nivel de hogar, los hogares representan el 72% de las emisiones de efecto invernadero a nivel global, lo que hemos visto en este estudio en hogares de ciudades intermedias es, primero, que hay que diferenciar según las dimensiones del hogar, los hogares necesitan energía para la movilidad, energía para la calefacción, para cocinar los alimentos, para iluminar la casa, etc.
Lo que estamos viendo con nuestros resultados es que las emisiones bajan significativamente por transporte, principalmente por la reducción de la movilidad por estudios, en calefacción se mantiene, incluso se experimentan leves alzas, pero donde hay cambios más significativos es en el aumento de emisiones por uso gas (hoy aumentando en precio) y por electricidad. De todas formas, hemos hecho las mediciones en dos periodos de la pandemia, invierno del 2020 y verano del 2021, al evaluar el año completo es presumible que igualmente se experimente una baja respecto al año 2019.
Coronel, Temuco, Valdivia y Osorno son ciudades importantes de cuatro regiones del centro-sur de Chile. ¿Los resultados muestran un comportamiento parecido o presentan diferencias significativas? En caso de haber diferencias notorias, ¿qué factores influyeron en el análisis?
CR: Experimentan comportamientos parecidos con algunas diferencias importantes, por ejemplo, en calefacción son todas dependientes de la leña en prácticamente en un 80% de los hogares, es decir con o sin pandemia el sistema de calefacción es el mismo, pero sí se ve cómo Temuco está mejorando en ir incorporando la energía eléctrica para calefaccionar los hogares y Valdivia es la ciudad que más emite por efectos de la calefacción. Respecto del gas, también Coronel y Temuco tienen las mayores alzas.
En términos de transporte todas las ciudades tienen tendencia a moverse más en automóvil, e incluso aún más en pandemia, pero en Osorno los consumos de gasolina son los más altos, siendo la ciudad donde menos se reducen las emisiones de co2 por movilidad, seguida por Valdivia.
De los datos levantados ¿Hubo resultados que les sorprendieron, respecto de lo que tenían inicialmente planteado como hipótesis?
CR: Sí, lo más sorprendente fue el aumento del gas, en el equipo asumimos un aumento de emisión por electricidad por el teletrabajo y el estudio en casa, pero no conocíamos la importancia del gas en los hogares Chile. También nos sorprendió mucho y al contrario de lo que está pasando en Santiago, que los viajes en bicicleta no aumentaron y siguieron representando el 1% de los hogares.
Además, tenemos patrones de alimentación que aún estamos analizando que son muy novedosos, por ejemplo, ⅓ de las compras son con despacho, otro tercio de las compras son presenciales en Ferias y a medida que avanza la pandemia se compra más en almacenes. Ha aumentado la compra en emprendimientos locales y los alimentos que se piden a domicilio llegan principalmente en auto, aunque en ciudades más grandes como Temuco adquiere mayor presencia la moto.
¿Qué elementos se recogen de esta iniciativa para plantear modificaciones y/o actualizaciones a la política pública en materia de sustentabilidad y convivencia ambiental?
CR: Bueno, hay varios aspectos que se pueden abordar, a corto plazo los hogares necesitan apoyo sobre todo en invierno, están ad portas de enfrentar un nuevo invierno con alzas en consumo y posiblemente con mayores alzas en precios respecto al año pasado, por ejemplo, en el gas y en el pellet. Además, enfrentan un segundo año de pandemia con una baja considerable en los ingresos. La dependencia de la leña, también implica que enfrentan la pandemia con peores calidades de aire.
Más a mediano plazo para enfrentar las consecuencias de esta pandemia y a la vez producir mejoras en sustentabilidad, será vital incrementar programas para mejorar la aislación térmica de las viviendas, el recambio de calefactores de leña y mejoras considerables en transporte público, desde sus condiciones sanitarias, la frecuencia, seguridad y la accesibilidad que cubren para que las personas no dejen de usarlo. También requieren infraestructura por ejemplo para la movilidad de peatones y de bicicleta, otra de las acciones es potenciar las compras de proximidad y en los comercios locales entre otras
Con el equipo estamos elaborando un set de propuestas que estamos validando con actores de políticas públicas
¿Qué pasos futuros vienen en el proceso de la ejecución del proyecto y los resultados que ya han ido obteniendo?
CR: Vamos a presentar los resultados en un focus group a una cantidad importante de actores locales y nacionales para fortalecer políticas públicas y puedan tener más conocimiento de las ciudades post COVID-19 que tendrán que gestionar.
Prontamente haremos un webinar público con los resultados para quienes estén interesados.
Entregaremos todos estos resultados al Ministerio de Ciencia y esperamos ellos puedan hacer el link con otros ministerios y concretar alguna de estas propuestas para encaminar a las ciudades del centro sur a la sustentabilidad.
Sigue los avances del proyecto :